El mal aliento puede ser difícil de ignorar si proviene de alguien con quien tienes contacto cercano, como una pareja o tu hijo.
Se estima que el mal aliento afecta a 1 de cada 4 personas en todo el mundo. También puede ser una fuente de preocupación y vergüenza. Sin embargo, si tu hijo experimenta mal aliento, o halitosis, es importante investigar qué lo está causando.
La halitosis tiene varias causas variadas y puede persistir a pesar del tratamiento médico:
- Dental / oral: en la mayoría de los casos, la falta de higiene oral es el principal culpable. ¿Tu hijo se limpia bien los dientes, las encías y la lengua todos los días? Si no, la placa puede acumularse fácilmente y producir olor. Peor aún: la placa puede irritar las encías y causar inflamación entre los dientes y las encías llamada periodontitis y gingivitis. La caries dental (caries) y los empastes astillados también pueden ser una causa.
- Deshidratación: ¿Sabías que la saliva es crítica para limpiar la boca? Si tu hijo está deshidratado o tiene la boca seca, esto podría estar causando la halitosis. ¡La hidratación es la clave!
- Enfermedad: Las enfermedades febriles en los niños, la infección de las vías respiratorias superiores y / o una infección sinusal pueden provocar mal aliento debido a la congestión nasal y la respiración bucal. Esto generalmente se resuelve una vez que la infección desaparece.
- Orejas, nariz y garganta: Si bien los cálculos amigdalinos generalmente se han visto implicados como causa de mal aliento, se desconoce la tasa exacta de aparición. Los cálculos amigdalinos generalmente se forman en las criptas de las amígdalas y su presencia en la superficie de las amígdalas puede provocar mal aliento recurrente. Los niños y adolescentes también pueden experimentar esto después de haber tratado de extraer la piedra de las amígdalas de las criptas de las amígdalas. Después del drenaje nasal, el moco constante en la parte posterior de la nariz y la boca debido a alergias y / o reflujo también puede causar mal olor. La sinusitis crónica con inflamación adenoidea también puede provocar mal aliento persistente. Incluso una vez que se descartan problemas dentales y otorrinolaringología, muchos niños aún pueden tener mal aliento persistente.
¿Qué se puede hacer para la halitosis?
Es importante tener en cuenta que la halitosis es un síntoma, no una enfermedad en sí misma. Para el tratamiento, identificar la causa subyacente suele ser el primer paso.
Debe comenzar llevando a tu hijo a ver a un dentista. Es importante recordar que el cepillado y el uso del hilo dental deben complementarse con una limpieza regular de la lengua, ya que muchas bacterias que causan halitosis viven en la superficie de la lengua. Enjuagarse la boca también ayuda.
Es importante que los padres sepan que muchas veces no podremos encontrar un diagnóstico definitivo. Sin embargo, mantener una excelente higiene bucal, incluida la limpieza de la lengua, es eficaz en el tratamiento de la halitosis.
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